23/12/10

El videojuego como obra de arte

Los videojuegos son obras de arte desde el momento en el que son capaces de transmitir sensaciones. Parémonos un poco a pensar para ver si somos capaces de darnos cuenta del gran acontecimiento que esto supone.
Antes de la aparición de los videojuegos, las obras de arte ya transmitían sensaciones. Pero ningún tipo de arte podía transportarte a un universo completamente diferente en el que las únicas normas son las limitaciones del propio lenguaje de programación. Ninguno podría transportarte a un mundo totalmente artificial, creado de la nada, y a placer del programador. Acojonante. Somos capaces de introducirnos sin darnos cuenta en realidades completamente alternativas. Asumimos el rol de un avatar creado por el programador e incluso, ¡Somos capaces de crear nuestro propio avatar!. Nuestro avatar es capaz de hacernos sentir derrota, deshonra, diversión, victoria, orgullo, compañerismo y hasta adicción. A través de un procesador somos conducidos hacia un universo alternativo de posiblidades inmensas, tan inmensas como la imaginación y recursos del propio programador, pero no solo eso, en algunos casos somos los jugadores los que contribuímos a la creación artística . Es un avance tremendo. El hombre ha sido capaz de superar las barreras de la metafísica clásica, y ahora no solo son plausibles realidades simultáneas en espacios distintos al mismo tiempo, sino que se manifiestan diariamente y como algo cotidiano. Con los videojuegos y el contenido interactivo, esto es capaz de elevarse a la máxima expresión.

Pero debemos recordar que hasta la contemporáneidad artística el arte estaba limitado a la belleza. Por suerte esto es algo superado desde hace tiempo, la fealdad del arte contemporáneo pone de relieve que no hay una relación necesaria entre arte y belleza. Ni la belleza busca al arte ni el arte a la belleza.
Hay algo curioso en todo esto, y es que el modo en que la belleza se realiza es la propia historia del arte. Pero esto ya son divagaciones distintas.
Hoy en día, todo lo artificial capaz de ser percibido como arte por parte del espectador es una obra de arte.
Para el desarrollador, los videojuegos son capaces de elevar la conciencia espiritual del mundo interno y externo como un objeto en el que él reconoce su propio si mismo.
Como una auténtica obra de arte.
¿Cual es el fin del videojuego, divertir o deleitar? ¿Competición o placer? Los videojuegos son obras de arte desde el momento en el que se han librado (como todas las artes han hecho con el tiempo) de la satisfacción de necesidades.
Hay muchos ejemplos de videojuegos en los que él mismo se supera en las típicas expectativas de diversión, competición o entretenimiento.
Un ejemplo modesto sería el juego en flash "Every day the same dream" en el que el fin mismo del juego es instruirte en tu propia vida, es un juego que sin ni una sola palabra tiene un increíble contenido filosófico. Recordemos que hubo un tiempo en el que se pensó que la finalidad del arte era enseñar. Una forma de hacerte comprender un concepto. Esto nos lleva a pensar que los videojuegos, como artes que son, están en constante evolución, pero no debemos olvidar que aún están "en pañales" con resto de artes que llevan miles de años reinventándose. A pesar de la velocidad con la que han evolucionado los videojuegos, se han producido miles de estilos de juego diferentes, y aunque desde luego no tantos como diferentes corrientes artísticas, esto no es más que una simple cuestión de tiempo.
Otro caso curioso y que vale la pena señalar es el de "Every Extend", un videojuego al que os juro que se puede jugar símplemente por el placer estético que supone hacerlo.
Esto es lo que me lleva a dar una vuelta más de tuerca y pensar en el videojuego ya no solo como obra de arte, sino como instrumento generador de arte.
Atribuirle al videojuego la capacidad de imitar, de imitar nada menos que los modelos que se hacen de él. Podríamos hablar casi de hiperrealidad.
Pero aún hay más; los videojuegos no solo se pueden considerar obras de arte como las conocíamos hasta ahora. Éstos, en muchos aspectos están por encima de las típicas formas de arte tradicionales, ya que en el arte tradicional (salvo en la música) sólo se puede representar una idea, una visión o un sueño. Los videojuegos no solo son capaces de representar una simple visión, sino que son capaces de llevarte a una realidad completamente alternativa.

Como conlusión os dejo un consejo, y me autocito: No debemos tratar a los videojuegos como un mero entretenimiento ya que una obra de arte solo es tal cuando hay voluntad por parte del espectador para concebirla como arte. Debemos pensar y apreciar los videojuegos como lo que son: Auténticas obras de arte.


"El arte es una representación desinteresada y en tanto en cuanto es desinteresada, es un conocimiento más verdadero que la ciencia, porque la ciencia lo que representa es la objetivación de los fenómenos, pero el arte representa la objetivación de las ideas. La música es la objetivación de la voluntad misma." A. Shopenhauer.

PD. A modo de presentación, os diré que soy "el violador ketamínico" y que entre varios amigos de mi entorno y yo, vamos a tratar de revivir este antiguo proyecto de nuestro compañero Daniel.

El violador ketamínico

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